Final de los 100 metros libres, Londres 2012. Nathan Adrian y james Magnussen, alias el Misil. El misil pierde, mala llegada, piernas dobladas y ligeramente abiertos, suficientes para frenarse y permitir que se le escape la victoria.

La técnica de la llegada falla hasta en los mejores nadadores del mundo, permitiendo muchas veces que un nadador apenas conocido arruine totalmente la carrera a un nadador de resultados estables, pero que falla a la hora de hacer la llegada. Dicho de forma más directa, a la hora de precisamente hacer efectiva su victoria. Este momento solo dura segundos y muchas veces, apenas centésimas, pero es cuando se cometen errores que son lamentados durante toda la vida.

Llegada final 100 mariposa Londres 2012, Phelps vs le Clos

Los errores de llegada son clásicos y desgraciadamente, muy frecuentes, incluso en nadadores de élite, campeones del mundo y olímpicos. Aquí les dejamos casos famosos:

Matt Biondi: Final de 100 metros mariposa. Seul 1988. Matt Biondi va delante durante toda la prueba pero realiza mal el toque final, permitiendo que Antony Nesty sea campeón olímpico por solo …una centésima! Esto, traducido a distancia, es menos de 1 milímetro! Error? Estira demasiado la última brazada en mariposa, una técnica de nado que debes calcular muy bien la llegada, pues fácilmente puede el nadador quedarse corto. La probable causa fue que en la última respiración vió qu eiba delante de Michael Gross, su eterno rival y pensó que iba a ganar sin problemas. Pero olvidó que no solo Michael Gross estaba nadando…

Otro ejemplo clásico lo pudimos ver en la final de los 100 metros mariposa de Beijing 2008.  Este impresionante final se convirtió en motivo de criticas y hasta acusaciones políticas. Causa? Complejos humanos. En el caso de Matt Biondi y Anthony Nesty (que entrenaba en la Florida todo el tiempo, aunque compitiera por Surinam), no hubo problemas posteriores pues el nadador de piel negra le gana al nadador de piel blanca norteamericano y archifavorito. Esto el gusta al gran público. Pero aquí sucedió al revés. El nadador norteamericano y archifavorito  Michael Phelps le gana al servio (que entrenó todo el tiempo en los EUA, también en la Florida por cierto) Miroslad Cavics, el cual iba ganando casi toda la prueba. De cualquier modo el problema fue el mismo. Mal toque justo en el momento final. Por suerte para Michael Phelps, al año siguiente le volvió a ganar con una ventaja mayor y en algo se tranquilizaron los nervios del público.

Como por desquite del destino, Phelps pierde en los 200 mariposa de Londres 2012 por una causa similar con el nadador de Africa del Sur Chad le Clos:

No solo en la prueba de los 100 o 200 mariposa ocurre esto. En la final de los 100 metros libres de Londres 2012, el favorito australiano James Magnussen pierde con el norteamericano Nathan Adrian por el toque final. La causa fue que no estiró correctamente las piernas al tocar,  perdiendo apenas milésimas de segundo al frenarse, pero las suficientes para que  Adrian rematara con elegancia e hiciera su nombre famoso por siempre.

Si es entrenador, sea preciso en la llegada, exigiéndosela de forma correcta en cada toque que se haga en el entrenamiento. Si es nadador, nunca realice una mala llegada, ni siquiera cuando entrena pues los movimientos correctos deben ser repetidos para automatizarlos y  poderlos ejecutar en cualquier momento y condiciones.