La natación es uno de los deportes que más usa los hombros. Es por ello que casi la mayoría de las poquísimas lesiones que provoca este deporte, vienen asociadas con esta articulación. Es tan frecuente que existe hasta una denominación médica: “hombro del nadador”. Existe algo similar en el Tenis de Campo, llamada “codo del tenista”. Lo lastimoso del asunto es que la lesión no debiera llamarse de ese modo, sino más bien “hombro del nadador que nada mal“, pues surge por un movimiento incorrecto al nadar, pero extremadamente frecuente, que a veces, ni los mismos entrenadores corrigen. O sea, la lesión debiera ser evitada, a diferencia del codo del tenista, que debido a los impactos constantes de la raqueta con la pelota, es casi irremediable la lesión en el codo, pues es la articulación que más asimila el impacto.
En el caso del hombro, sucede que si el movimiento se hace correctamente, no hay ningún problema. Cuando la articulación va más allá del ángulo bajo el que funciona correctamente, la lesión poco a poco va creciendo, hasta que se hace insostenible.
Aquí les dejamos una imágenes del movimiento correcto, donde se ve claramente cómo se debe hacer. Esto debería tenerse en cuenta desde que uno comienza a practicar natación hasta cuando ya se es experimentado. Lo que se rota al nadar es el cuerpo, empezando por la cadera, NO los hombros, los que quedan de manera natural en la posición adecuada, sin lesiones, siguiendo la rotación del cuerpo, y este, la rotación de las caderas.
En el caso del mariposa, pudiera pensarse que es más fácil, pues las caderas se mueven hacia arriba y hacia abajo, no longitudinalmente. Los mariposistas comúnmente exageran el movimiento de los hombros hacia atrás, lo que provoca con el tiempo, graves lesiones de los hombros. Lo más llamativo es que los entrenadores pocas veces prestan atención a esta posición forzada, “siempre y cuando gane”, no hay problema. Y llega el momento en que el atleta ya no puede más con su hombro, lesionado de miles de rotaciones incorrectas, dañando la articulación.
Alineación correcta de los hombros en la técnica de libre.
Alineación correcta en la técnica de espalda
Alineación correcta de los hombros en la técnica de mariposa.
La exageración del movimiento más allá de esa línea, provocada en general por un exceso de flexibilidad de la articulación y por una poca vigilancia por parte del entrenador, conlleva a graves lesiones de la articulación, sobre todo porque el dolor no comienza de pronto, sino cuando ya se posee la lesión en un grado avanzado y hay que dejar entonces de nadar, agravado dicho suceso por la cantidad de veces que el nadador tiene que hacer el movimiento de hombros al nadar.
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